Los dominicanos tenemos que trabajar incesantemente de sol a sol para tratar de llegar a fin de mes y cerrarlo sin consecuencias, pero para la mayoría es una misión casi imposible. Pero hay quienes han nacido como la auyama, fruta conocida como calabaza, zapallo, ayote y otras acepciones dependiendo donde usted se encuentre, “con la flor en el culo”. Mientras el común de las gente tiene que hacer milagros para malvivir o sobrevivir, en el mejor de los casos, aquí hay quienes pretender vivir como suizos, con exhibiciones petulantes sin reservas, con acervos sin origen ni explicación.
Este pasado fin de semana entendí un poco mejor el baloncesto dominicano y las figuras que se mueven en su entorno. Los grandes ganadores del momento, aquellos hombres “exitosos” parecidos a los actores de la novelita empresarial “Aguacates Juan” de Lorenzo Vicens, convertida en todo un best seller en el país. El pasado sábado en horas de la noche recibí una llamada invitándome a revisar la edición de la fecha de El Nuevo Día, principal diario puertorriqueño en la actualidad. Una cosa me fue llevando a la otra y me encontré con otras cosillas delicadas.La crónica indicaba que el guard dominicano Mike Rosario, uno de los más buscados jugadores del área este de todos los Estados Unidos, fichado por Rutgers University, con una destacada participación en el clásico McDonald’s de este mismo año, se decantó para jugar por Puerto Rico. La misma fue comentada en la edición de esta misma fecha de Diario Libre por Nathanael Pérez. Meses atrás cuando ofrecí la información sobre el jovencito, desde los alrededores de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) lo menos que hubo fueron amenazas de demanda judicial (buscar: Una Diáspora que No Trabajamos).
Quizás debí acercarme a la institución y ofrecerle los detalles, pero recordé que hay un gerente de selecciones que se sabe todas, infalible, que no acepta opiniones de terceros, además que pretende ser una fiera con dientes y garras. Me acordé que hay un representante en la ciudad de Nueva York que debería ocuparse de esos asuntos, ya que el anterior, Pedro Pablo Pérez, resultaba incomodo a los ojos de la entidad. Rememoré el trato desconsiderado a mis hijos por ese tinglado malsano, patrañero, pernicioso, anodino, mediocre, embustero, pueril, ineficiente y con escasa visión.
Todo luce indicar que se perdió a Rosario, ya etiquetado como el relevo de Larry Ayuso en la selección borincana. No creo que alguien cercano a la FEDOMBAL tenga cojones, contactos y capacidad para echar ese pleito. Se perdió en esta misma administración a Juan Méndez, Charlie Villanueva y otros de quienes quizás nunca más sabremos. Pero hay más, seguro Pedro Pablo tiene más de uno, posiblemente Julián Suero tenga los suyos, quizás Orlando Antigua se haya encontrado con uno o dos. Yo mismo estoy investigando unos pocos y no dejo de tomar anotaciones.
Observé por televisión y me carcajeé muchísimo con una entrevista que el amigo Eury Hernández le hacia al presidente de la FEDOMBAL, ingeniero Frank Herasme, donde tocaba temas como disciplina, puntualidad, y otros tópicos. Pensé, ¡oh mi Dios!... ¿sabrá en su intimidad lo que eso significa? Cuanta capacidad para hablar bazofia y no decir nada. No se le puede pedir peras al olmo. Las deudas de la entidad son enormes. Para peor, más adelante me encontré en la página Latinbasket.com un listado de agentes dominicanos donde en primer lugar figura el nombre del señor Héctor Báez, actual gerente de selecciones.
Al regreso de la selección dominicana de México hace apenas un par de s
Por ello también mi sospecha con Antonio –Chicho- Sibilio, quien entrena jugadores de manera individual y pretende colocarlos fuera del país, y pese a ello se le entregó la selección juvenil del país más de una vez. El manejo del grupo en su última salida dejó mucho que desear, pero varios de esos chicos están en España.
Lo de De La Rosa es más delicado, es asistente del equipo de baloncesto de Manhattan College y según las intrincadas reglas de la NCAA (Asociación Nacional Atlética Colegial, por sus siglas en inglés), no puede estar haciendo contactos con jugadores de otras instituciones. Hay incontables prohibiciones en los códigos y una violación a ellos, podría acarrear con su trabajo.
Por lo demás, cacarear sobre el costo de la selección nacional es asqueroso. Puerto Rico asistió al Pre-Olímpico de Grecia, celebró por lo menos series de fogueos en Europa y estuvo en el Centro-Basket de México y gastó la suma de 750 mil dólares. La República Dominicana solo estuvo en Cancún, no celebró partidos de exhibición y anunciaron que sus emolumentos habían sido de 265 mil dólares. No hay punto de comparación. Además de un equipo viejo, que no conduce a ninguna parte, es mugrientamente costosísimo.
Herasme tiene una crueldad sin límites para el deporte de todos y para sus adversarios. Nos ha llevado a reorganizaciones inclaudicables, objetivos sin plazos, sendas de grandeza que desaparecen, fronteras cada vez más lejanas y toda esa palabrería hueca que esconde el vaciamiento de la disciplina y la peor hecatombe contra los nuevos valores en la historia nacional. Parecen los tiempos de Joaquín Balaguer y su banda colorá.
Los hechos me dicen que esa patulea de indeseables, iluminados y demagogos están convirtiendo el baloncesto dominicano en una enorme cloaca donde las ratas campean a sus anchas. Esos están dejando nuestra piel bravía como pellica de comadreja, o dicho de otro como un auténtico estercolero donde la mierda rebosa y nos obliga a tapar la nariz. Muchos han permanecido un tanto ajenos a esta debacle, aburridos de tanta maledicencia, basado en continuos y viscerales combates dialécticos, excluyentes y difamatorios. Sin embargo comienza a respirarse en las calles un ambiente de indignación y hastío que favorecerá el despertar de todos contra los promotores de tamaña serie de despropósitos.
¡Que se vaya ya!
No importa cuantas veces quieran invalidar, desautorizar, rescindir, excluir, suprimir, quitar, amenazar, tachar, a estos “lametraserillos” les diré que siempre habrá un lápiz para seguir escribiendo. A ellos, el prolongado uso del chupete les está deformando la encía superior. Que se anden con cuidado no sea que la flor que según dicen tienen en el culo se le transforme en un cardo borriquero o, peor aún, en una planta carnívora y los fagocite.




